martes, 26 de abril de 2016

Sobre Premios, Puppies y Pequeños Ponies

Por lo que he visto en diversas redes sociales, la reacción más común a las nominaciones a los Premios Hugo 2016 que se han anunciado hace unas pocas horas es un "¿¿¿¿Cómo que My Little Pony????". Y es que en la categoría de Mejor Presentación Dramática - Forma Corta (episodios de televisión, para entendernos, aunque también pueden caber otras cosas) hay una línea que destaca cual arcoíris tras tormenta veraniega: My Little Pony, Friendship is Magic: The Cutie Map (Part 1 & 2).

Como he dicho en varios sitios, no es quizá lo peor de toda esta lista (me parece aún más grave que se hayan "colado" cosas como SJWs Always Lie, por ejemplo) pero sí que es, tristemente, muy significativo y representativo de toda la polémica que se ha generado en torno a los Premios Hugo de unos años para acá. Porque aunque pueda parecer que la aparición de una serie infantil entre los candidatos al galardón es un error o de una broma pueril, lo cierto es que es, una vez más, un movimiento concertado y organizado por parte de los autodenominados Sad Puppies y Rabid Puppies (capitaneados, cómo no, por Vox Day, a quien, si no conocéis, os invito a descubrir en su faceta política y literaria; eso sí, aviso que no es plato de gusto en ninguno de los dos aspectos).  

Y es que el hecho de que esos episodios en concreto de My Little Pony hayan sido nominados a los Premios Hugo por iniciativa de los Sad/Rabid Puppies es una muestra más de que no se enteran de qué va la lucha por la igualdad. Además de que también evidencia que carecen de la más mínima capacidad de interpretar incluso la metáfora más sencilla (eso, por otro lado, también explica mucho sobre sus gustos en lo literario, por cierto).

Los episodios en cuestión parece ser que tratan (no los he visto, pero he leído el resumen del argumento y, sobre todo, los comentarios de los propios Sad Puppies y este absolutamente alucinante "análisis" sobre el "mensaje" de The Cutie Map) sobre una distopía en la que los ponies son forzados a renunciar a sus marcas distintivas ("cutie marks", unos dibujitos que tienen todos y son distintos en cada caso) para conseguir la "igualdad" (de hecho, las marcas son reemplazadas por el símbolo matemático de igualdad, como podéis ver en la imagen de la izquierda). Ante esto, los protagonistas de la serie se rebelan y reclaman su identidad propia y personal frente a esa "igualdad" impuesta de forma artificial. 

Pues bien, algún iluminado (o unos cuantos, más bien) de los Sad/Rabid Puppies ha interpretado que esto es una metáfora de las reivindicaciones por la igualdad de las mujeres, de los negros, de los homosexuales...  Y por eso han decidido nominar esos episodios en bloque, para que los "Social Justice Warriors" (sic) sepan lo que es bueno.

Lo que yo me pregunto es... ¿en serio no se dan cuenta de que precisamente lo que se reclama cuando se habla de igualdad es justamente lo contrario de la uniformidad? Lo que se reclama es diversidad, variedad y representación de todas las razas, géneros, ideologías, orientaciones sexuales, edades, creencias, nacionalidades, culturas... pero ¡nunca uniformidad! ¡Todo lo contrario!

¿Acaso oyen "igualdad de derechos" e interpretan "igualdad de mentalidades"? ¿No es, más bien, esa uniformidad lo que ellos quieren y buscan? Uniformidad en la que todo el mundo sea igual a ellos, claro, que lo demás es confuso y da miedito.

De verdad, se me hace muy, muy difícil entender esta forma de pensar (por llamarla de algún modo). Y lo peor no es que afecte a unos premios literarios como pueden ser los Hugo (cosa que a mí, personalmente, ya me molesta bastante pero que se puede quedar en anécdota), sino que, por desgracia, es una mentalidad que afecta a la sociedad en muchísimos aspectos y causa injusticias y sufrimiento a mucha gente. Qué tragedia que no sepan (o no quieran) entender un mensaje tan, tan sencillo que incluso los niños que ven My Little Pony son capaces de comprender perfectamente. 

(Nota: Había publicado inicialmente esta reflexión en mi muro de Facebook, pero me ha parecido que podría ser interesante recuperarla y extenderla un poco aquí, para que tenga un poco más de permanencia)

27 comentarios:

  1. Gran reflexión, Elías, y gran análisis de la situación.

    ResponderEliminar
  2. Madre mía cómo está el patio. Fíjate que en su día me gustó tanto el podcast de Verdhugos donde hablabais sobre votar en los Hugo (antes de la Loncon) que estuve a un tris de hacerme socio y pagar la cuota.
    Estando así las cosas ni me lo planteo :(

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sinceramente, a día de hoy yo ya no recomiendo votar en los Hugo. ¿Para qué? Yo desde el año pasado ya no voto.

      Eliminar
  3. Bien dicho, Elías. Es una auténtica lástima que se estén cargando los Hugo. Quizá definitivamente. Pero así son estos "libertarios" de extrema derecha: tan amantes de sus libertades y tan poquito de las de los demás.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "tan amantes de sus libertades y tan poquito de las de los demás"

      Totalmente de acuerdo.

      Eliminar
  4. Yo soy una de las que reaccionó de primeras así, ni me di cuenta de lo de "SJW always lie". Pero sabiendo de qué va el capítulo me indigno aún más si cabe. Gracias por esta entrada, ellos no se enteran pero tú lo has explicado genial.

    ResponderEliminar
  5. Yo soy una de las que reaccionó de primeras así, ni me di cuenta de lo de "SJW always lie". Pero sabiendo de qué va el capítulo me indigno aún más si cabe. Gracias por esta entrada, ellos no se enteran pero tú lo has explicado genial.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Sofía. Es un tema tan esperpéntico como indignante :(

      Eliminar
  6. Coincido contigo Elias. Para algunos el siglo XXI no ha llegado aún, aunque sepan votar por internet.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Por lo que dicen los Sad Puppies en los comentarios que enlazas, han nominado lo de los ponis porque creen que critica el comunismo, no porque vean una crítica al feminismo. Vamos, ahí mencionan "marxism" y "East Berlin".

    ResponderEliminar
  8. Creen que critica la "imposed equality", en particular el Comunismo (dicen explícitamente "The-Comunism-Isn't-Magic Episode") y, por extensión, cualquier ideología igualitaria. En cualquier caso, siguen sin entender nada de nada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De hecho, aquí he encontrado un artículo (que ya he enlazado en el post) que explícitamente se mete con feministas, SWJs y todo el que no sea total y exclusivamente individualista: http://thefederalist.com/2015/04/08/my-little-pony-to-children-marxism-is-not-magic/

      Eliminar
  9. Bueno, ya lo has explicado perfectamente, odo. Una capacidad de análisis tan mermada que son incapaces de ver la ironía de un asunto que en el fondo les está retratando a ellos mismos. Donde no hay mata no hay patata.

    ResponderEliminar
  10. Gran entrada Elias. Que peligro tienen algunos dibujos. Yo sigo insistiendo en Hora de aventuras. Ningún otro tiene una princesa científica. Aún así veré el de los ponies.Lo mismo se puede utilizar como ejemplo de como los dibujos trasmiten valores, no siempre deseables.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Javi. Yo los ponies estos nunca los he visto. En casa son más de Bob Esponja. Y lo cierto es que una vez me planteé nominar un episodio de viajes en el tiempo que estaba muy chulo :)

      Eliminar
  11. Esa torticera interpretación de la "igualdad" como sinónimo de uniformidad es un clásico del discurso reaccionario. Es ese "respeta mi derecho a no respetar a nadie"

    ResponderEliminar
  12. Pero, ¿y de verdad se lo creen? ¿O es simplemente un sofisma que repiten como un mantra a sabiendas de su nula base?

    ResponderEliminar
  13. Están absolutamente convencidos. De hecho esas ideas están basadas en la interpretación "libertad" desde el punto de vista de liberalismo económico. Una pirueta que te coloca en ese ámbito tan atractivo como la libertad individual para decir y hacer lo que te da la gana. Pero es una manta muy corta que no llega a tapar tus miserias en forma de machismo, racismo y todos los -ismos que puedas imaginar. Porque en nombre de la libertad se pueden llegar a defender cosas muy, muy turbias.

    En el otro extremo pasa exactamente lo mismo. La igualdad como sinónimo de pensamiento único, la colectividad como la anulación de la persona (1984)

    Ambos caminos en su extremo pretenden lo mismo, la perpetuación de la desigualdad para asegurar los privilegios propios.

    ResponderEliminar
  14. Yo sí vi el episodio cuando lo echaron por la tele. En efecto, es una distopía; es un pueblo donde se eliminan las marcas de los ponys y por tanto sus talentos particulares para que nadie destaque sobre los demás. Es una muy evidente metáfora del comunismo, en la línea de Rebelión en la granja. Recuerdo que cuando lo vi, antes de saber toda esta historia de los Hugo, pensé que estaba muy bien que una serie infantil "para niñas" se atreviera con guiones de este tipo. No os dejéis llevar por los prejuicios. My little pony no es Hora de aventuras, obviamente, pero tampoco es exactamente la moñada que muchos piensan. Creo que sorprendería a más de uno.

    ResponderEliminar
  15. Gracias Elías por la buena reflexión y análisis. Ayer hice una lectura rápida de tu entrada sobre los Premios Hugo, me pasó desapercibido el 'lío' de la categoría de mejor presentación dramática. Hoy me ha encantado tu análisis con el que estoy muy de acuerdo, todo está bien si es o está como a mí gusta o como yo creo que debe ser, pensamiento reaccionario y ultraconservador.

    ResponderEliminar
  16. He pinchado este enlace porque pensaba que era más actual, no recordaba haberlo leído en su momento :)
    En su día pensé lo mismo que tú, pero de qué van estos.
    Más tarde me enteré de otra parte de la película (o de la serie).
    Recientemente se ha estrenado una obra de teatro que se llama así, "el pequeño pony". Trata sobre un caso de acoso escolar que sufre un niño que lleva una mochila de esta serie al colegio, y está basada en dos casos reales que ocurrieron en Estados Unidos.
    Leyendo este artículo de El Confidencial, creo que se pueden sacar otras interpretaciones a la nominación.
    http://www.elconfidencial.com/cultura/2016-08-16/el-pequeno-poni-teatro-bullying-luis-luque-maria-adanez-acoso-escolar_1245924/
    Parece que, por lo que comentan aquí, sí que hay un movimiento en torno a "mi pequeño pony" que busca luchar contra el bullying, fomentando valores de amistad, respeto y tolerancia.
    Quizás la nominación iba más en ese sentido.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gustaría creer que es así, pero viendo los comentarios en la web en la que decidieron nominarlo, me es muy, muy difícil.

      Eliminar
  17. Te falta el análisis del paul corners. Hay se desvelan todas las claves ;-)

    ResponderEliminar